viernes, 22 de junio de 2012

Notas de Febrero

Días del mes inestable, nunca sé si tendrá 1 día mas o uno menos, siempre me toma de sorpresa saber que de repente es 1º de nuevo.
El clima tampoco es seguro, puede llover o hacer el mas tremendo calor del año, la gente y su euforia de amor, la gente y su tormento de desamor, lloran y ríen al mismo tiempo, algo domina sus almas y las hace vulnerables a cualquier espontaneidad.
Uno aparentemente solo planear ser feliz, yo creo es al revés.
Las despedidas mas amargas se resienten a final de un año, el peso de la vida se deja caer, uno espera que todo dure para siempre, pero parece imposible, ni siquiera podemos vivir mas de 120 años, la inmortalidad consiste en hechos, en legados jamás en vida, al menos no la física.
Esperamos tanto, tiempo desperdiciado, anhelamos tanto, esperanza desbordada. Repetimos tantos patrones como si tuviéramos tiempo de jugar a experimentar lo que ya ha sido probado con la esperanza de que a nosotros nos resulte diferente.
Cantamos esas canciones que nos lastiman intentando que curen heridas que a veces no tenemos.
Lloramos esos recuerdos que nos hicieron felices esperando que se repitan una y otra vez, olvidando que quizá afuera haya otros mejores.
Este mundo no da permiso de disfrutar de la soledad, todo esta hecho en números par.
Nos apegamos a las personas que no necesitamos, por el miedo a la soledad.
Inventamos historias sobre el futuro sin conocer su pasado.
En un mundo donde nadie se conoce se forman lazos, nos sorprendemos de que a la larga resulten ser desconocidos.
Somos impulsivos, volamos sin alas y nos lamentamos de haber caído.
Quisiéramos tener otra vida y corregir errores, sin pensar que esos errores eran necesarios.
Nos equivocamos sin aprender la lección, así que volvemos a tropezar.
Reflexionamos sobre el comportamiento general, intentamos aprender a no ser como ellos.
Corremos tan a prisa que nos cansamos.
Buscamos en esos cajones nuestros sueños, pero no los encontramos más.
Gritamos tan fuerte que nuestra conciencia se queda sorda.
Bailamos ese ultimo vals, no queremos que termine, vemos el reloj y ya no hay tiempo.

1 comentario:

  1. Hola. Me gustó como el texto fue llevándome sutilmente de lo contradictorio que puede ser febrero a hablar sobre la soledad y el paso del tiempo.

    La absoluta nostalgia es algo muy común, somos propensos a padecerla e idealizar un pasado que probablemente fue más placentero que el presente. El futuro no existe y aún así también lo idealizamos, por lo que cuando se vuelve presente puede llegar a desilucionarnos.

    La soledad no es algo necesariamente negativo. Tenemos miedo a la soledad porque no sabemos cómo estar con nosotros mismos. El estar solo es estar consigo mismo, el que no gusta estar solo es porque no ha aprendido a estar consigo mismo. Claro que también queremos estar con los demás, con alguien más; pero para compartirnos con los demás.

    El tiempo, la soledad y algunas otras cosas abordadas aquí serán mencionadas en mi próxima entrada de mi blog. Aún no la termino, se me vino el tiempo encima y mis colegas cefalópodos subieron una pequeña entrada para darme un poco más de tiempo.

    Saludos, que tengas excelente inicio de semana.

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