Hace
tiempo hacer una entrada como esta habría sido sencillo, no sé, creo que he
condicionado el escribir con sentimientos tales como; la nostalgia, la
tristeza, la depresión.
Solía
creer que era buena con esto de escribir, no digo que fuera cierto, pero me
provocaba cierto entusiasmo, luego te lo crees, tomas un curso de redacción y
te despedazan, enfoque mi blog a reseñas musicales y algunas crónicas pero no
más a mis divagaciones mentales, esas las dejé en Twitter.
Entonces;
¿Cómo empiezas? No sé, algo aleatorio… Me encuentro escuchando una canción que
le pide al amor que lo evoque, al menos en sus sueños, creo los enamorados no
correspondidos se (nos) conforman (conformamos) con muy poco; una sonrisa, un
abrazo, un mensaje, vaya, con nada. El tiempo es relativo, para alguien
enamorado una eternidad de espera es viable, para otros un año, dos años, tres
años y la vida se ha ido por completo.
Hablar
de amor como si se fuese un experto, hablar del tiempo como si tuviera más de
cien, hablar de dinero como si no faltará, así somos y no creo que eso sea
malo, nadie lo sabe todo pero tampoco nadie es tan ignorante como para no saber
nada.
A
veces me pregunto qué tan ilusa puede ser una persona que gusta de escuchar a
los demás e incluso aceptar sus consejos, yo soy una de esas personas; me gusta
escuchar diferentes perspectivas, al fin
y al cabo todos seguimos consejos, sí, los nuestros y tampoco creo que
sea malo, lo he hecho mucho tiempo, el problema es cuando no vemos otras
opciones, la carga a veces puede ser muy pesada para uno solo, va de la mano con
dar consejos que no te piden, a veces, sobre todo para mí, es difícil distinguir, tiendo a ser
protectora, me gusta creer que puedo arreglar las cosas y tal parece hay cosas
que no tienen solución y si la hay; esta fuera de nuestro alcance.
Aceptar que
no puedes hacer nada duele, pero te das cuenta que no puedes seguir invirtiendo
en algo que no te genera dividendos, y sí te preguntas las verdaderas
intenciones probablemente no sean tan buenas como creías, si no me gustará tanto,
un ejemplo de las intenciones que buscan la recompensa en donde no la hay.
Tú,
yo, todos solemos reprocharle mucho al presente, culpamos al pasado y esperamos
que el futuro nos trate mejor… Hay días en los que creo en el destino, otros en
los que no y quiero cambiarlo todo, supongo ustedes igual, la esperanza me hace
pensar que las cosas están diseñadas para que al final la mejor resolución dé
dividendos, la lógica en cambio me dice que las cosas son así porque mi
esfuerzo no ha válido lo suficiente para conseguir lo que quería, pero si no
sabes manejar bien la lógica esta te puede destruir, una de las desventajas,
punto para la esperanza.
Lo
ideal sería decir acabe con esto, cumplí para ti y alejarse… Pero no he podido,
quise hacerlo al revés, alejarme y acabar con esto, como si hubiese una
relación entre la distancia y los sentimientos, no la hay, nuestra mente se
queda aunque nosotros estemos en otro lado, me urgía irme, no quería estar más
aquí, al final te das cuenta de que eso no cambiaría nada, aún no he tocado
fondo con esto, lo sé, pero me gustaría que eso pasará pronto, no tener ninguna
esperanza, no tener nada, llegar a ese momento en el que las cosas no podrían
ser peor, entonces resignarme y levantarme, porque cuando se está hasta abajo
lo único que puede pasar es que empieces a levantarte.
Espero
que como las películas con final feliz esto sólo sea el comienzo de lo que será
un fin feliz, deseo que todo esto sólo haga que esta historia sea más épica y
que esa recompensa la pueda saborear un poco más, es más deseo que esta no sea
mi historia, porque finalmente sólo escribo, quiero que sea la historia de
cualquiera de ustedes, la historia de todos, yo seguiré observando.
Diría
la canción, resumiendo esto perfectamente: “Esperanza de cambiar sin dejar al
desaliento dominar…”